DIA 14 (17/1/2014): 2º DIA TREKKING: UGEM – SYOKOSIMO - KAPAGALO
HACIA SYOKOSIMO
Escuela en medio de la montaña.
Nos despiertan a las 7hs, ¿no estoy de vacaciones?. Desayuno abundante
café, té, mermelada, frutas, galletas y a patear. En este trayecto las vistas son realmente increíbles. Pura naturaleza virgen con el río Baliem a lo
lejos atravesándola. Esta zona está más poblada, a pesar de estar más lejos de
la “civilización” llamada Wamena. Atravesamos varias aldeas, entre ellas
Syokosimo, alguna que otra escuela rural desde donde no siguen muchos niños. De vez en cuando se ven placas
fotovoltaicas que alimentan el faro principal de la aldea. Aquí el recorrido es
más traicionero, los senderos son estrechos y hay varios precipicios. No es
buen momento para que se me salga la suela del zapato, pero así sucede.
Uno de los tantos puentes de madera y ramas
Sobre las 14 horas llegamos a una aldea en Kapagalo
donde nos quedaremos el resto del día. A la buena comida se une por primera vez
un dani auténtico, de los de calabaza
en miembro. Durante la charla nos dice que ronda los 65 años, muchos no saben
su edad exacta, que tiene dos esposas y 4 hijos. Antes de las dos mujeres
actuales tuvo quince esposas, “la última se me divorció” nos traduce el guía.
Los Dani mayores son los que más conservan la tradición de ir prácticamente en
pelotas a excepción de la calabaza que le cubre el banano y el hilo/tanga que
lo sostiene por su cintura. Están medio ciegos, algunos del todo, por el humo
de las fogatas que hacen en las cabañas para cocinar y calentarse. Después nos dormimos una siesta en este lugar
espectacular, entre el humo, el calor del fuego, los sorbos ruidosos de los
Dani bebiendo su té y el colchón de paja de la cabaña.
¿ Qué pasa contigo ?
LA TECNICA DANI DE ASAR BONIATOS
El horno casero de boniatos: piedras,telas,brasas y boniatos.
Nos invitan a comer
boniatos. Las plantaciones de este tubérculo abundan por toda esta zona del valle de Baliem, son el alimento principal, junto al arroz que
compran en Wamena, de los pobladores. Vamos a una cabaña pegada al corral de
cerdos donde cocinan el boniato de una forma muy particular. Es una sucesión
de capas de boniatos, brasas, piedras y telas. Esta combinación se
repite varias veces hasta formar una pequeña pirámide. Luego de unas horas en
el fuego empiezan a retirar capas, primero las telas, después las piedras
calientes, el carbón y finalmente los boniatos. Hay un montón de patatas dulces
que están muy sabrosas y apetecibles a pesar de tener el estómago lleno del
almuerzo. Parte de los boniatos sobrantes se los tiran a los cerdos, que arman una batalla campal frente a la cabaña en su lucha por un pedazo, mientras que la otra la almacenan para comer en otro momento.
Sacando los boniatos calientes
Este dani fue el guía en Kapagalo
LA ULTIMA CENA
Cabaña típica Dani.
En varias aldeas hay alguna placa fotovoltaica para encender farolas.
Por la noche, que allí es a partir de las 18 hs, volvemos al
ritual de la cabaña: fogata, té, charlas, etc
.Quizás porque ya nos vamos mañana, porque estamos al lado de una fogata o porque no se oye más que el crujir de la leña quemarse, Jonas Wenda, que no se caracteriza por su fluidez verbal, se suelta un poco y nos habla de él. Dice que tiene tres esposas ,“todas en habitaciones diferentes, yo voy
cambiando todas las noches de dormitorio” comenta sonriendo. Tiene varios hijos
aunque no recuerdo el número. Luego empieza a hablar de la corrupción política,
que también existe en Indonesia como no podía ser de otra manera.Nos dice que "en Papúa hay muchas empresas que extraen minerales, oro los coreanos, petróleo
crudo los indonesios que se lo venden barato a los estadounidenses y luego se
lo compran refinado mucho más caro a los propios norteamericanos. “Y todas esas
ganancias “ dice “ no se invierten en esta región sino que van a parar a Bali o
a Yakarta”. Después habla de una
carretera eterna que jamás se termina entre Jayapura y Wamena, y que los tiene casi aislados a no ser por los aviones, debido a problemas de
burocracia y corrupción política. También dice que "el gobierno trae trabajadores de la
región de Java para trabajar en las pocas empresas, sobretodo de servicios como
hoteles, que hay en Wamena en vez de utilizar a los ciudadanos locales". Ya en
pleno rodizio quente, afirma que el gobierno "no hace nada
por explotar la cultura local, el turismo autóctono del valle Baliem", “solo
buscan el dinero rápido” . “Aquí esto se podría aprovechar mucho más”
continúa. Por último dice con su voz serena, ronca y sabia “la gente de aquí
está cambiando, se está volviendo loca por el dinero, buscan más y más, no
tienen límites”. Después de esta oratoria nos llevan a dormir a una vivienda “moderna”
de cemento con dos dormitorios y plagada de pulgas.
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