Techos típicos en esta zona de Indonesia |
Nos levantamos con la intención de dar la vuelta a la isla
en moto. Gracias a la luz del día pudimos apreciar mejor el entorno de este
lago de origen volcánico. Aunque estábamos en la zona céntrica de la isla:
hoteles, hostales, locales de comida, tiendas, no había mucha gente. A pesar de ser un lugar que podría estar
saturado de explotación turística debido a su privilegiado entorno y naturaleza,
por suerte aún no lo está. Le alquilamos la moto a la vecina del lugar donde
nos alojábamos, 80.000 rupias con tanque lleno y un par de cascos. Alé, alé. Avanzamos a través de la agujereada carretera
que rodea la isla y enseguida salimos de la zona “céntrica” que ocupa un porcentaje
mínimo del total. Allí se empezó a ver lo auténtico de este pequeño paraíso, las casas de arquitectura tradicional Batak, con unos techos de madera inmensos y curvados, una
inclinación pronunciada supongo que por la lluvias, los arrozales con campesinos
trabajando, las casitas de la gente local, las palmeras bordeando la carretera
y el lago, los cultivos con los búfalos arrastrando el arado, los pescadores a remo tirando las redes para
pescar, etc.
Mercado tradicional |
A los pocos kilómetros paramos en un mercado tradicional de fruta, verdura, carnes, ropa, telas y
mangos, mangosteen,
piñas, guanábana, litchi, cocos, papaya, pitaya, maracuyá, durian, nangka, longan, rambután, belimbing. Algunos de los pescados
están vivos en agua y la carne está al al aire libre pero no hay moscas.
Compramos algo de fruta y un par de telas tejidas a mano. Al rato de irnos del
mercado empezó a caer una tromba de agua como suele pasar por estos lares. Intenté proteger mi cámara de fotos que
llevaba colgada al cuello dentro de la camisa pero a partir de ese momento me
quedé sin máquina de fotos ya que durante todo el resto del viaje solo funcionó
un par de días a pesar de comprar una batería y cargador nuevos.
objetos varios que se hace una vez por semana y que vale la pena visitar. En
estas zonas rurales plantan como se hacía antes y la verdura es la que sale y
la fruta también. Sin pesticidas ni nada. La variedad de frutas tropicales es
extensa y muy buena:
Anuncio del funeral Batak |
En medio del chaparrón vimos al borde de la carretera unos carteles con figuras y palabras hechos
con flores de muchos colores. Parecía una
fiesta. Había mucha gente. Decidimos parar allí para protegernos del agua y
unirnos a lo que fuera aquello. Nada más llegar la gente nos miraba entre
sorprendida y sonriente. Al entrar vimos una
especie de bar donde no cabía ni una mosca y más adelante
una carpa grande que parecía la de un circo. Fuimos para allí porque había más espacio
donde refugiarse del agua. Lo primero que vimos fue una vaca atada a un palo en
medio de la carpa. Esta dura poco. Había mucha gente que llevaba vestidos
tradicionales de la zona, un presentador con un micrófono y un par de cámaras
grabando. La gente aplaudía y
bailaba con un balanceo hacia adelante y atrás. Aquí hay fiesta seguro pensé. Estaban
todos ubicados en círculo alrededor de la carpa. Intentaba averiguar algo
preguntando con gestos que era todo aquello, hasta que una señora me señaló
hacia un lado de la carpa. Era un ataúd abierto de cintura para arriba.
El funeral dura varios días |
El muerto y la vaca a punto de morir |
Pasó un
tipo con una cesta llena de rupias donde la gente iba tirando dinero. Empecé a sacar fotos y me dijeron que me fuera
a fotografiar al muerto, así que me
acerqué. Ahí entendí aquello de “pálido como un muerto”. La cara del
hombre era blanca, transparente. Después me enteré que
hacía cinco días que había muerto. Poco a poco fuimos entrando en confianza y
terminamos dentro de la casa de la familia del muerto. Para los batak la muerte tiene más fiesta que
tristeza. Allí dentro nadie estaba triste, quizás crean en otra vida o la
reencarnación. O tal vez haya muerto un
enemigo. Nos sentamos en el suelo y empezamos a hablar. Yo conocí a un sobrino
del muerto, se llamaba Johan y era profesor de física en un instituto de
Medán. Me contó que los funerales son
tipo fiesta y que viene mucha gente, familiares, amigos, vecinos y que puede
durar más de un día. En la isla de Sulawesi desentierran a los muertos y vuelven a festejar el entierro. Se meten unas fiestas multitudinarias para la que ahorran durante varios meses y donde sacrifican a
búfalos, vacas y cerdos. El hombre del ataúd tenía sesenta años y según Johan
los indonesios tienen una vida media de
setenta años.
Ritual del funeral Batak
También hablamos de la sanidad, dice que allí todo es privado y
que si alguno no tiene recursos tiene que enviar una carta al ministerio
correspondiente para que lo ayuden.
Estos asuntos burocráticos y lentos muchas veces terminan en muerte para
el enfermo antes de que llegue la respuesta. Nos contó con cierto orgullo que
ya hacía 40 años que habían “matado” a los dutch people o los habían enviado a
plantar tulipanes y elaborar emmenthal a los países bajos… forever. Hablo de
corrupción en la política…no hay país en que se salvé de esta gente, están por
todo lados. Mientras hablábamos me iba presentando y sacándome fotos con la
familia que había por ahí. Nos invitaron a comer, arroz, como no, y dos o tres
tipo de carne. Luego de un par de horas nos despedimos y nos fuimos. Llovía y
nos refugiamos en un bar a tomar algo caliente. En mi caso café con leche. En
varias zonas de indonesia el café con leche, no es con leche de vaca sino con
leche condensada, que por densidad queda en el fondo del vaso bien diferenciado
del café. También se conoce como café bombón.
...
KOPI LUWAK O CAFE DE CIVETA, UN CAFE DE MIERDA
En Indonesia hay una variedad muy amplia y buena de cafés.
En muchos sitios el café se prepara de forma instantánea con agua caliente pero
tiene una consistencia, un color y un sabor mejor que el nescafé instantáneo
tan común en los países occidentales. Pero el café que se lleva la palma es el
café Luwak. Este café se prepara de una
forma curiosa. La civeta, un bicho parecido a un castor come granos de la
planta de café. Parece ser que es de paladar fino y sólo elige los mejores
granos de café. Una vez ingeridos los caga y ahí van los productores de café
Luwak a recogerlos, lavarlos, torrefactarlos, molerlos y lo que haga falta para
finalmente venderlos a precio de oro. Este café de” mierda” es el más caro
del mundo, a siete euros los cincuenta gramos en Indonesia, donde es barato. Cuenta
la leyenda indonesia que durante la época
de la colonización holandesa, los esclavos le pedían a los dutch people tomar
café y estos le contestaban “ya mismo te lo doy, lo quiere con leche y/o largo
de café … ?... fuking nigger”. Así más o menos eran el trato que recibían. Por
lo tanto tuvieron que buscarse la vida
para probar el café. Como eran gente de
muchos recursos se percataron que lo que no querían darle los dutch people si
se lo podían dar las civetas por el ano, así que lo recogieron, lo lavaron y lo
probaron. Y colorín colorado terminó siendo el café más cotizado del globo
terráqueo.
Estamos en la estación húmeda y se nota. No para de llover,
por lo que no queda más remedio que seguir en la moto y mojarse. Aunque solo pudimos dar
un cuarto de vuelta a la isla valió la pena. El resto queda pendiente para otro viaje. Llegamos al hotel,
descansamos y por la tarde fuimos a buscar una opción de viaje hacia Padang.
Había dos opciones: 1) en las famosas 4x4 negras, más incómodas, asientos no
reclinables, 8 horas de viaje que seguro
serán más y más cara o sino 2) el bus, más
cómodo ya que tienen asientos reclinable, más barato pero de 17 a 19 hs de viaje. Es importante la
comodidad ya que el viaje en cualquiera de las dos opciones será largo. Nos
decidimos por el bus. Otra vez a intentar que algún comisionista lo consiga.
Primero hablamos con uno de una pizzería que tras hacer un par de llamadas nos
dice que no hay billetes de bus hasta dentro de tres días pero que sí en las
4x4. Sospechamos que este se lleva algo de la empresa de las 4x4 y así es
porque más tarde hablamos con otra persona que tras un par de llamadas nos
consigue billete en bus para el siguiente día. El precio es de 280.000 rupias.
Por la noche salimos a dar una vuelta
por la zona céntrica que nos faltaba. En el camino vimos un pub que vendía pinturas tradicionales sobre tela.
Compramos un par. Ya casi al final de la zona céntrica escuchamos música , nos
acercamos y nos invitaron desde un bar a tomar algo y escuchar su música. Nos
invitan con vino de palma, obtenido de destilación de la hoja de palmera. Es
blancuzco y no tiene un buen sabor. La gente canta con pasión sus canciones y
encadenan una tras otra. Luego de un rato nos fuimos a cenar ( 3 euros por
cabeza) a un restaurante de comida
indonesia con vistas a un oscurecido lago Toba iluminado levemente por las
pocas luces distribuidas a lo largo de la costa.
Uno de los tantos campos de arroz |
Información turística y biblioteca |
Algunas de las típicas pinturas Batak sobre tela que exponen y venden en la isla:
...
Boletus mágico |
En varios bares y restaurantes ofrecen el hongo mágico, magic mushroom. Nadie supo o quiso
decirme de donde sale pero aseguran que tiene
potentes poderes. De hecho va gente al lago Toba solo para probarlo. La alemana
que lleva el hospedaje dijo que nunca lo probó porque un día vio a un huésped
bajo sus efectos que aseguraba ser perseguido por dragones y hubo que hacer
grandes esfuerzos para que no se tirara al lago, ya que quería huir nadando de
las bestias. La marihuana es legal en la isla. Aunque en realidad yo creo que
lo es porque allí no llega la policía.
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